La emoción precede a la razón
/ admin /“Cuando puedas poner palabras a lo que sientes te apropiarás de ello”
- Roth
Nuestro cerebro recibe información desde diferentes niveles.
Algunos estudios aseguran que nuestro cuerpo manifiesta cambios ante modificaciones emocionales mucho antes de hacernos materialmente conscientes de ello. Este es el caso de la piel, por ejemplo, que modifica su conductancia eléctrica según lo hace el nivel de activación emocional.
Así lo demostró Antonio Damasio mediante un ingenioso experimento al que llamó “test del apostador”:
Un jugador era estimulado a apostar con diferentes tipos de barajas. Mientras tanto se recogían modificaciones en la conductancia de su piel a través de un electrodo unido a su mano.
Unas barajas tenían grandes premios y otras no.
Los resultados fueron los siguientes:
El sujeto de estudio tenía que robar unas ochenta cartas hasta comprender cuál era la baraja más ventajosa y por qué. Sin embargo con sólo robar unas diez cartas la conductancia de la piel del sujeto ya rebelaba cambios ante la baraja que después demostró ser la más “positiva” para sus apuestas.
Podríamos decir que el sudor de la mano del jugador sabía cuál era la baraja ganadora mucho antes que la propia mente de este.
Podríamos decir que “la piel se adelantó al cerebro”.
El cuerpo recibe información del cerebro emocional y produce cambios de manera paralela a cómo lo hacía la conductancia en el “test del apostador”.
Como afirma H. Roth, poner en palabras las emociones le hace a uno dueño de ellas y, por extensión, le hace dueño de los efectos de estas sobre su salud.
Tomar conciencia de las emociones es la esencia de la Inteligencia Emocional.
Cuidar la salud de las personas es la esencia de mi profesión.
La aplicación y el conocimiento de la Inteligencia Emocional por el médico resultan sencillamente: Imprescindibles