A continuación te cuento algunas cosas sobre mi trayectoria profesional:

Estudié Medicina en la Universidad Complutense de Madrid.

Soy especialista en Medicina Familiar y Comunitaria.

Tengo interés en aquellas disciplinas que pueden apoyar al crecimiento de las personas. Mi formación en estas cuestiones es la siguiente:

– Master en Coaching personal y ejecutivo por la Universidad Camilo José Cela.
– Especialista en Inteligencia Emocional por esta misma Universidad.
– Practitioner en PNL por el Instituto de Potencial Humano.
– Experto en Tabaquismo por la SEPAR (Sociedad Española de Patología de Neumología y Cirugía Torácica)

Desde 1998 trabajo como médico de familia en el Centro de Salud Villa de Vallecas, aunque también tengo experiencia en medicina privada.

Tengo varias publicaciones en revistas científicas y también hace años escribía cuentos y poesías que incluso me sirvieron para ganar algunos concursos literarios.

Hace 8 años publiqué el libro: Cartas para un opositor. El club de las segundas oportunidades.

En la última década de mi vida profesional he descubierto que me encanta la docencia . Hace varios años imparto formación sobre todo en herramientas de Inteligencia Emocional y Coaching para todo tipo de personas aunque con especial dedicación a pacientes y profesionales sanitarios.

En el año 2011 formé un grupo de trabajo en la Sociedad Madrileña de Medicina de familia llamado Salud Basada en Emociones formado por magníficos compañeros todos ellos interesados en el aprendizaje y sensibilización de la importancia de las emociones en la salud. Hace un año también comencé la implantación de este grupo a nivel nacional con la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria.

Quiero que sepas que siempre que he querido ser médico. Desde lo más profundo de mi corazón. Desde que era pequeño me encantaba ser médico de cabecera, de esos que llaman a sus pacientes por su nombre y saben que son sus médicos de confianza.
Sí, es verdad que las cosas cambian, que la medicina es cada vez más, un bien de consumo y que a veces los profesionales de la salud sentimos que nuestro trabajo no está suficientemente reconocido. Pero también es cierto que a todos nos mueven emociones muy parecidas como el amor por el ser humano. Por una vida con menos dolor. Por una vida desarrollada en todo su potencial.